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jueves, 30 de agosto de 2007

Maravillas en los centros comerciales

Lo prometido es deuda, y tampoco quiero tener al cobrador del frac por ahí rondando, aunque por otro lado, siempre he querido tener escolta...

¡Ay!, ¡qué sería de nuestras vidas sin los centros comerciales!, ¡qué sería de las tardes muertas, los fines de semana muertos, los días muertos!, no sé, lo mismo revivirían, dirán algunos; pero, no, un centro comercial es mucho más que eso, vamos a ahondar algo en el tema, cuan informe de laboratorio que se precie:

- Descripción:
Un centro comercial es un marmotreco de algún material pétreo y/o cerámico de tal forma que constituya una estructura estable, si bien su diseño debe ser lo más sencillo por fuera (un cubo feo de grande cumple con dicha descripción), o bien, si el terreno no es muy favorable, o hay poco espacio, se pueden hacer todas las esquinas posibles, a modo de fractal, para aprovechar el terreno, es decir TODO el terreno, una vez elegido el cuadrado que va a dar forma a dicho marmotreco, tan sólo hay que elevar el edificio a la misma altura por arriba que por abajo, si bien los sótanos estarán destinados a los vehículos (no sé por qué, ya que, estos centros no usan la luz natural, pero bueno, será cuestión de estética)

- Funciones:
Aquí tenemos varios subapartados, entre los que destacan:

1. Provocar entre 5 y 20 km de atasco en la autopista cercana (sí, todos están al lado de la autopista), esta es su función principal, si bien tiene otras sub-funciones

2. Emputecer a quien se atreve a embarcarse en la odisea de intentar llegar a una hora normal y aparcar en las 75 plantas de aparcamiento que poseen, eso sí, requisito indispensable, no matar a nadie para conseguir dicha plaza, si no luego vienen unos mendas vestidos de negro con gorra y te dicen que has hecho algo malo, te ponen las esposas y te llevan a la cárcel (yo creía que las multas por aparcar mal tampoco eran para tanto...)

3. Concentrar a la gente en los pasillos, o en las tiendas de las que dispone en el interior, mirando, más no adquiriendo nada (que digo yo, después de todo esto, la gente va allí a pasar el día, es como tener una excursión al infierno con los gastos pagados...)

Ensayo práctico:

Llegando al objeto de la misión, comienzo a observar a especímenes medio humanoides, que acompañarán durante toda la misión, podríamos llamarles para abreviar llamándoles humanos-ovejas, debido a su comportamiento, mirando hacia arriba con cara de enteleríos y llevando un movimiento totalmente aleatorio y caótico (nunca vi que las leyes de los gases se cumplieran tan bien...), chocando entre sí y produciendo fricciones que luego se traducirán en calor y en un aumento de la presión total del recinto, aumentando la temperatura.
La temperatura del local es la temperatura típica para los cultivos bacterianos, unos 31 grados, es la temperatura justa en la que el género homo sapiens sapiens (homo de hombre, sapiens... se continúa investigando lo que significa) le empieza a entrar la caraja y se nos reblandece la corteza craneal, se convierten en seres (aún) más manipulables y desplumables.
También es menester que haya puestos de cosas inútiles en el interior del recinto, cuanto más absurdas mejor, que actuarán con embudo, provocando un efecto Venturi, en el que la gente chocará más, y habrá más rozamiento, aumentando un poco más la temperatura.
Además, es imprescindible, en todo centro comercial que se precie, tener un par de vigilantes de seguridad que se paseen con aires de peligrosos, marcando sus pérfidas barrigas (que mira que os tengo dicho que la mochila se lleva en la espalda, no en el ombligo), vigilando que todas las ovejas vayan por sus caminos predefinidos.

En fin, no recuerdo nada más, creo que salí corriendo de allí en cuanto noté que mi cerebro se reblandecía, esquivé el puesto de cuadros del pato Donald, las señoras de la limpieza (sí, hasta que no vea un señor de la limpieza no me creeré que no sea la profesión más ligada al género que hay) intentaron hacerme una barricada, menos mal que doy las zancadas grandes, hice un quiebro y desaparecí por una puerta lateral.... buf.... menos mal, ya pasó todo... ¡qué sofoco!

Ahora quedaba lo mejor... ¡¡¡¿¿¿Dónde huevos he aparcado el coche???!!!; pero esta es otra historia, sé que el informe no quedó completo, pero... es lo más cercano que he estado de ser oveja en mi vida... el susto no me lo quita nadie...

No creo que vuelva a hacer algo tan de riesgo como esto :P

miércoles, 29 de agosto de 2007

Historia de un horror, o como perder la tarde tontamente

Todo comenzó siendo un inocente viaje a comprar unas zapatillas nuevas, ya que, si me descuidaba un poco, probablemente me tocaría ir descalzo en pocos días... en fin, me armé de valor, y emprendí la tarea, todo iba bien hasta que... alguien decidió acompañarme... ¡sí!, era mi madre. - Bueno, pues nada, allá que nos vamos. - dije, y allí fuimos, al principio todo iba bien, hasta que llegamos al sitio en cuestión, pude comprobar por enésima vez que la gente cada vez conduce peor, y hay gente que se compra carrazos con 200 caballos para usar 60 (los otros los tendrán de reserva, por si se cansan) y otros que salen haciendo ruedas con un flamante Saxo del 98, pero bueno, ese es otro tema.

Ya estábamos dentro, el mal estaba hecho, de repente, perdí a mi madre... ¡a buscar que toca!, la encontré absorta mirando un lineal de ropa... se empezaba a mascar la tragedia...
2 horas más tarde, salíamos con 5 pantalones, 4 camisetas y sí, mis zapas, menos mal, por lo menos el objetivo estaba cumplido, bueno, eran en torno a las 6 de la tarde ya, tampoco está tan mal, hasta que, al subir al coche, sonaron las palabras más temibles que una madre te puede decir: "bueno hijo, ya que estamos, a la que subimos paramos en el Carrefour que tengo que comprar unas cosillas"

Sí, se me cayeron los huevos al suelo, ¡no era para menos!, allá que fuimos... parecía que iba a ser rápido e indoloro, hasta que, en la entrada, allí estaba con mirada desafiante... ¡un puesto con collares!, ¡maldición!, ¡oh desgracia!, ¡oh dolor!, ¡mustios collados! ¡¡la oscuridad se cierne sobre mí!... Y vaya si se cernió, a la hora conseguí sacarla de allí, la pobre estaba como abducida, ya eran casi las 7... y falta comprar...

¡¡Por fin un punto a mi favor!!, comenzaba a estar cansada, creí que nunca vería esta situación... eso sí, salimos con el carro hasta arriba, y eso que dentro de 2 ó 3 días volvería a por el resto (acojona, ¿eh?), a casa y a descargar... menos mal, ya ha terminado todo.

Informe final:
Hora de inicio de misión: 16.00
Hora de finalización de misión: 20.00
Objetivos cumplidos: ¡TODOS!, algunos que no sabía que existían, eso sí, cumplí el objetivo de la misión principal como un rey

¡Felicitaciones soldado!, pues ya sabes lo que toca de aquí a 2 ó 3 días... Eso sí, como premio me he ganado todo una bayonesa para el postre... ha merecido la pena, ¡y con creces!

PD: mañana ver si me curro un ensaño sobre los especímenes que van a visitar los centros comerciales, que da para un libro

lunes, 27 de agosto de 2007

Reto

Hoy caminando, más bien, dejándome llevar por mi intuición he llegado a un lugar maravilloso, parece ser que estos días la señorita Azar me guía con guante de seda, ya vendrá el tiempo en que se quite el guante y use su mano de hierro, espero, que, por lo menos, no esté oxidada por las lluvias, si no correría el riesgo de infectarme, y no veo ninguna vacuna contra el Tétanos cerca, por ahora, bailo a su son sin perder un paso, y ella me conduce con armonía, hasta que fui a dar con una muralla, alta, imponente, intenté rodearla, más no vi su fin, intenté saltarla, pero era tan resbaladiza que ni con pies desnudos podía encaramarme a ella, no había ninguna puerta visible... pero no pude darme la vuelta y hacer como si no la hubiera visto, de todas formas, ¿qué hacía una muralla en medio del bosque?; y, ¿qué habría al otro lado?, mi curiosidad era demasiado grande. Me cansé y descansé durante todo el día, pensando e intentando algún modo de sobrepasarla, hasta que me di cuenta de que me sería imposible, y caminé y caminé para ver si podría rodearla, hasta que, de repente, algo me iluminó, me acerqué a la muralla, y escuché... oí que se dirigía a mi, me dijo. -Tu que tanto empeño pones, veo que sabes mirar dentro de ti, pero; ¿qué hay de intentar mirar dentro del resto de los seres?, veo que te has esforzado mucho por conocerte, se ve que eres valiente, pero, aún te quedan retos por afrontar, has ahondado mucho en el conocimiento de ti mismo, si bien de aquí a un tiempo ese conocimiento te parecerá superficial, pero ahora, te propongo un reto, y un juego, tan sólo tienes que mirar en mi interior, yo ya te diré si miras correctamente, o no...- Sus palabras retumbaron como truenos en mi cabeza, hasta que al fin comprendí lo que me quería decir, vi unos ojos en lo alto de la muralla, observé como iban bajando hasta ponerse a mi altura, y simplemente miré, con la inocencia de quien no se sabe con que se va a encontrar, miré con curiosidad, pero no escudriñando, miré para observar, pero también para ser observado, me sentí transparente...

De repente la muralla se tornó en una mueca de alegría, y miré, estupefacto, como las piedras se habían convertido en cristal, un cristal impoluto, había puertas por todas partes, todo era cristalino como el agua de un riachuelo en calma... la muralla me volvió a hablar. - ¿Acaso era esto lo que esperabas?, no te lo tomes a mal, sé que no esperabas nada de detrás de mi, por eso te he abierto todas mis puertas, he mirado en tu alma tanto como tu en la mía, y te he encontrado tan transparente como yo, no olvides esta lección, si quieres comprender, simplemente quítate la máscara, no vale de nada traer ropajes, tan sólo ven como tu eres, y así, si puedes ver correctamente dentro del resto de los seres, se te mostrarán tal como son, no tendrán secretos para ti, pero tu tampoco para ellos, es tan sólo una relación mutua...-

- ¡Vaya!, lo tenía tan cerca y no lo podía ver, de cuando en cuando está bien que te abran los ojos, para ver las maravillas que se ocultan en el mundo, y dejar de mirarse hacia dentro, para poder mirar hacia afuera...- la muralla desapareció con una mirada de ternura, y continué el camino, mecido por la señorita Azar, si bien estaba aún más contenta conmigo, había superado otro reto...

Moraleja: Debes mirar tanto adelante, como hacia los lados, mira tanto dentro como fuera de ti, y, si tu eres hermoso, ¡¡imagina la hermosura que te rodea, tan sólo hay que buscarla con los ojos adecuados!!, aprende a mirar, aprende a sentir, y todo se tornará en armonía

domingo, 26 de agosto de 2007

Como un árbol meciéndose por el viento del Sur

Hoy estoy feliz, me siento como en una nube, tan solo espero que no se deshaga y caiga como agua de Mayo, convirtiéndome en una charca donde puedan habitar los renacuajos, aprovecharé todo el tiempo que pueda el estar así, es una sensación única, otro tipo de droga, más duradera y con efectos prolongados, además no cometes demasiadas estupideces cuando estás en su regazo. Noto las endorfinas volando por mi torrente sanguíneo, se me acelera el pulso y se me dilatan las pupilas, no logro comprenderlo mucho, he perdido jugando al baloncesto y estoy feliz, no sé por qué podrá ser, y lo peor es que no me importa, simplemente, estoy feliz, como una gota en el borde de un saliente que por fin cae, jovial como un niño y su mirada de inocencia, feliz como el que por fin se comprende y puede dialogar con su sombra, feliz y sereno como el que va corriendo por el campo en un día templado, tan feliz que ya nada ni nadie puede evitar que lo esté, tanto que por mucho que se obceque el resto de la humanidad, no podrá hacer nada por evitarlo, sintiendo que el mundo gira a mi alrededor y orgulloso de estar así, procurando juntar con armonía las notas en mi boca, cantando y pensando con tierna dulzura, con un tono que incluso a mi me resulta extrañamente ameno y familiar, tremendamente templado y hogareño, como una hoguera controlada en una estufa, y con suficiente comburente como para estar ardiendo pausadamente durante todo el invierno, ahora nadie me puede parar, tan sólo porque nadie puede meterse en mi cabeza para destruir esto, y no porque haya murallas, las he abierto todas, simplemente que si alguien intenta entrar se quedará contagiado de tanta templanza, y se quedará perezosamente quieto.

Ahora mismo me siento como una balsa en una palangana de aceite, todo es tan suave, tan flexible, tan inocuo, tan agradable que no tengo tiempo ni para asustarme de esta templanza, y espero que dure mucho tiempo, necesito un poco de armonía para poner fin a este caos, parece que he encontrado el ritmo, las situaciones se suceden a cual mejor, en una coreografía perfecta, ahora mismo ni me preocupa perfeccionar la perfección, eso lo dejo para más adelante, ahora tan sólo me queda disfrutar el día, y que para mañana no haya cambiado el guión, quiero una segunda, tercera y cuarta parte de esta película, y luego todos los extras, no pienso moverme de la butaca sin ello, estoy demasiado cómodo como para ello.
Me siento ligero, puedo ir con paso rápido y certero hacia cualquier rincón de mi espíritu sin tener que esconderme, un halo de luz me protege, veo a través de cualquier oscuridad y cualquier niebla, con clara despreocupación avanzo hacia mi objetivo, como experto arquero de Kyudo, no veo el objetivo, le apunto, y disparo, simplemente quiero llegar hasta allí, con la precisión del arquero más experto, ponerme en armonía con él, sentirlo cerca de mi, no me importa la distancia, lo veo claramente, con todos sus recovecos.

En fin, estoy en estado de interminable inspiración, y espero que dure, por lo menos, lo que tiene la palabra interminable de terrenal, aunque para mí siempre habrá sido corto, espero no esperar nada, disfrutar como un niño jugando consigo mismo, no cansarme nunca y que esto no termine, sé que no será posible, pero, ¿quien sabe?, en fin, ahora mismo soy demasiado feliz para pensar...

sábado, 25 de agosto de 2007

Conversaciones en las alturas

El otro día volví a elevarme a una altura considerable, poco a poco mis pulmones se van acostumbrando al aire frío, y mis ojos al vértigo de las alturas, por un rato dejé a mis fantasmas con la incertidumbre de estar a la espera, y allí, en el aire, me encontré con mi águila, mi fuerza de voluntad, estuve charlando un rato con ella, si bien siempre se situaba por encima de mí, no la culpo, tiene la costumbre de ver las cosas desde arriba, con cierta o mucha distancia, donde los errores se difuminan y donde todos los obstáculos parecen pequeños, ¡y es que mi águila si que tiene los pulmones acostumbrados al aire gélido de esas alturas!; hablé con ella de muchas cosas, si bien hubo una que me llamó más la atención, me dijo, si alguna vez notas que desaparezco a una altura demasiado alta para que me sigas, la mejor forma para superarte y llegar a verme de nuevo, tan alto como siempre, es buscarte enemigos, eso sí, busca bien, que estén a tu altura, no merece la pena mancharte de barro con alguien que esté por debajo de ti, y por esto tampoco te resultará útil hacer acopio de enemigos que estén por encima de ti, y es que, un enemigo es muy beneficioso, hace que saques lo mejor de ti mismo, para superarte, y poder estar un poco por encima, pero a su vez, él, si es un buen enemigo hará lo mismo, y ambos ascenderéis a cotas que nunca antes imaginaste, y, si tienes suerte, puede que me veas arriba, con mirada severa, pero templada, estaré esperando tu escalada; además, me dio otro consejo, se ve que estaba generosa, muchas veces -me dijo -; no hay mejor enemigo que uno mismo, pero para eso se necesita tener una fuerza de voluntad ya muy elevada, ya que muy pocos se atreven a luchar contra lo que realmente saben; es el también el enemigo más peligroso, puedes agotarte tanto que caerás al piso desde el punto más alto de tu elevación, y no creo que pudieras levantarte de esa caída...
- ¡Me marcho!. - exclamó - se te ve cansado, y además hay otros que te esperan, vuelve al risco antes de que tengas demasiado frío, allí te darán calor.

Las palabras retumbaron en mi cabeza durante un tiempo, me constó digerirlas, fue como una comida copiosa, pero lo que más me extrañó es que; donde hace poco me parecía una yerma planicie, bordeada por acantilados, desnuda, fría e inhóspita, con esos seres custodiándola, fuera ahora una fuente de calor. No lo comprendí hasta que llegué allí... ¡esta vez creo que estoy preparado para pasar una noche en el yermo!...

jueves, 23 de agosto de 2007

Parábola de los orbitales

Dedicado a Sara, espero estar a la altura:

Antes de nada voy a introduciros en la teoría de orbitales, es una teoría muy simple, se basa, en que cada elemento está compuesto de átomos, y esos átomos están dispuestos tal que, a groso modo, las cargas positivas están en el centro del mismo, junto con los neutrones, y alrededor se encuentran los electrones (vamos, lo de siempre), pero, esos electrones, se colocan en determinados lugares según la energía que tengan, en principio, en infinitas posiciones distintas posibles, pero a su vez, esas posiciones deben estar "fijas" en cuando a la energía que posee cada electrón, pues bien, ahora vienen las complicaciones, porque, los orbitales que estén a energías parecidas, pueden mezclarse (hibridan), para convertirse en una mezcla de los dos orbitales de los cuales vienen, resultando, por ejemplo, si se mezclan 2 orbitales de energía parecida, obtendríamos 2 orbitales idénticos en cuanto a energía, es decir, analíticamente, iguales.

Partiendo de esto, la parábola es sencilla, la sociedad, se compone de electrones y electrones, con infinitas energías, infinitas formas de pensar distintas, unos más arriba, otros más abajo, unos que irían subiendo, otros que irían bajando, teniendo un batiburrillo multicolor, si bien, el germen se extendió rápido, dos electrones que eran más o menos similares, se miraron dijeron, ¡somos iguales!, y dieron el gran paso, se fundieron y salieron 2 electrones idénticos... fue el principio del fin, los electrones, únicos, magníficos, comenzaron a hibridar entre sí, a mezclarse, dando como resultado un sin fin de electrones similares, al mismo nivel, ni más buenos, ni más malos, simplemente, iguales, vulgares; fácilmente localizables y manipulables, autocompasivos, no querían ser ni más, ni menos que nadie, pero así, ¡¡cómo iban a ser mejores!!; menos mal que quedaron alguno sin hibridar, a su libre albedrío, que subía de energía hasta el infinito cuando podía, y bajaba a 0 de energía cuando se agotaba, que buscaba enemigos, retaba a otros electrones, algunos quedaron, únicos, magníficos, siguiendo su juego, si bien no se paraban ni a mirar al resto de electrones-ovejas; iban tan rápido que ni siquiera los distinguían.

Ya sabéis, pequeños, sed vosotros mismos, sed únicos, sed vuestra mayor virtud y vuestro mayor fracaso, no hay más grandeza que eso, y sobre todo, fijaos en el paisaje como tal, como paisaje... mirad arriba, pero notad los pies en el suelo, y, si queréis ensalzaos, ¡bajad a vuestras profundidades!

miércoles, 22 de agosto de 2007

Tontería

Ayer fue un día tonto, más bien, fue el santo que más obra, San Inútil, y cuando obra, obra bien, o muy bien en su defecto, parecía que todos los inútiles hubieran quedado para hacer una quedada mundial, con el único fin de joderle el día al resto, ni que decir tiene que la gente normal salió corriendo, no vi a una persona, propiamente hablando, en todo el día...

¡Qué día más largo!, menos mal que acabó, sin ninguna baja humanoide en mi cuenta, todo hay que decirlo, a veces pienso que mi autocontrol ni tiene límites, si he superado esto, puedo con todo. Hacía mucho tiempo que no anhelaba tanto la llegada de, primeramente la Luna, que me indicara que todo estaba acabando, y más adelante de un nuevo Sol que saliera, me mirara con su inocencia y gritara, ¡¡ya se acabó la broma!!, y por fin, parece que se acabó, parece que todo ha vuelto a la normalidad en que por la calle hay personas e inútiles entremezclados, y no el monopolio de ayer.

Y es que es muy difícil vivir por un día en el mundo de San Inútil, yo diría que es casi imposible adaptarse, porque, quieras o no quieras, los tontos son muy ingeniosos, tienen todo tipo de artimañas preparadas para tocar la wevada al personal. Ayer me di cuenta, de que las señales de tráfico, en el día de San Inútil, son totalmente opcionales y accesorias, meros consejos de ancianos que ya no rigen bien, me di cuenta también que la velocidad máxima en cualquier carretera son 60 km/h, sin importar cual sea, y, si es de noche, no es recomendable superar los 50 km/h, aún yendo por autopista, me di cuenta que, yendo andando, el resto, sea cual sea, tiene preferencia para ir donde se le antoje, sin mirar siquiera hacia donde está caminando, y si se choca/empuja/pisa, la culpa es tuya, por tender a la normalidad, luego también me di cuenta en el trabajo, que se puede hacer poco y mal, sin que a nadie le importe, porque total, "ya habrá otro que lo haga por ti, no hay que preocuparse". En fin, fue un día de desengaños, me sentí como un burro en una cacharrería, y pensaba. - ¿Esta gente, donde se esconde los días normales?, y, ¿cómo ha podido sobrevivir tanto tiempo con este tren de vida?, es decir, ¿cómo, por un milagro de la vida, no se han estrellado con el coche, no se han puesto a pelearse entre ellos como quinceañeros, cómo, en definitiva, no les ha pasado algo?. - Llegué a una conclusión, San Inútil protege a sus fieles.

Si bien es cierto que según fue cayendo la noche el día se fue normalizando (supongo que los inútiles se irían retirando a sus aposentos y por eso no se veían tantos) fue un día para olvidar, y para recordar a la vez, con ese repelús en la mente, como cuando ves como cosen a un ser vivo una herida... lo único bueno es que ya pasó, pero, si bien todos los santos tienen un día asignado, este no, San Inútil es especial, es el más especial de los santos, aparece espontáneamente, como por arte de magia, cualquier día es bueno para San Inútil, tan sólo espero que tarde un poquito en salir la próxima vez, que tengo que recuperarme aún de esta...

Con lo que, os voy a dejar, como viene siendo costumbre, con un par de preguntas sin respuesta:

- ¿De verdad hay tanto tonto en el mundo?
- ¿Dónde se meten los tontos en los días normales?

Moraleja: Hay tontos que tontos nacen, y hay tontos que tontos son, y hay tontos que tontos quieren hacer a los que tontos no son.

lunes, 20 de agosto de 2007

RE - invención

Continué caminando por mi montaña, como una mañana más, ya veía con claridad; es curioso, algo que hace tan poco tiempo parecía tan tétrico comenzaba a tener tintes de la más inocente belleza, los animales del bosque ya comenzaban a sacar la cabeza por encima de los arbustos, más con curiosidad que con miedo; parece que me voy acomodando a este sitio...

Después de un largo rato caminando, vislumbré un lago, en una depresión, cerca del valle, y me dirigí hacia allí para beber un poco de agua; no parecía que hubiera bestias salvajes por la zona, aunque por aquí nunca me había aventurado; era una bella estampa ver el agua con esos tonos negros y azulados, rodeada de arbustos y, un poco más retirados, comenzaban a aflorar los árboles...

Fui con cautela, pero la sed me iba venciendo poco a poco, cuando llegué a la orilla, miré a ambos lados, me arrodillé y, al mirar al agua, no pude más que soltar un gemido sordo, miré nervioso hacia todas las direcciones, pero no había nadie, estaba yo sólo...

Giré otra vez la cabeza hacia el agua, despacio, cada vez más despacio... ¡ahí estaba otra vez!, me quedé paralizado nada más verlo...

Al cabo de un tiempo, comencé a recuperar la cordura, al principio me resistía ver lo que se reflejaba en el agua, hasta que al final comprendí... ¡¡era yo!!, ¡¡en eso me había convertido!!.

Me quedé un rato contemplándome, y pensando.. ¿cómo he podido llegar hasta esto?, ¿cómo he podido convertirme en esto?, pero, si miraba más de cerca, súbitamente comprendí, que era una segunda piel, así que sólo había que frotarse bien para que saliera, y así hice, me metí en el lago, y en sus aguas me froté y resquebrajé mi nueva piel, ahora comprendía porque me miraban raro los habitantes de esta montaña... si yo hubiera visto un monstruo tal, hubiera salido corriendo... estos tan sólo se dedicaron a ocultarse en sus casas, deben estar más acostumbrados que yo a ver a personas enmascaradas...

Al salir, me volví a mirar, ¡¡cómo había cambiado!!, volvía a ser el mismo, volvía a tener ese brillo en la mirada de los que están iluminados por dentro, vi a un ser misterioso, oscuro, y a la par jovial, con la inocente jovialidad de un niño, sin preocupaciones, sin tapujos y sin tabúes, un ser que juzga sin miedo a represalias, que corre por los acantilados sin mirar lo que le espera abajo, un ser, que se dedica a disfrutar cada momento que tiene en sus manos, antes de que se escape y se convierta en uno más para el recuerdo...

Me miré de arriba a abajo, y pensé -no está mal el resultado, aún falta para desprenderme de esta segunda piel del todo, pero hoy hemos hecho un gran trabajo, tendré que venir aquí más a menudo. - y volví a la aldea, a enseñarle mi cambio a todos los que allí se encontraban.

sábado, 18 de agosto de 2007

¡Viva el fin de semana!

Weno, quien me mandaría currar en hostelería, este fin de semana tengo menos tiempo que los rivales de Chuck Norris en ser derribados por el más grande. Así que os voy a poner una cancioncilla, sin que sirva de precedente; es de Skunk D.F. lo más grande que ha dado el metal español, la canción: En silencio, ahí tenéis la tonada:

Escúchame, en silencio...
Puedes oír, mis fluidos corren a tu encuentro
Fijación, no te entiendo...
En el corazón, sólo hay sangre, y nada más que eso....

Ya nada tiene sentido aquí
Soy retales sueltos de lo que fui... no...
En silencio... en silencio...

Escúchame, un momento...
Acuérdate, reventaste mi cuerpo por dentro...
Y aún conservo tu olor, aún conservo tu olor
lo conservo entre mis dedos...
Y aún conservo tu olor, aún conservo tu olor
lo conservo entre mis dedos...

Ya nada tiene sentido aquí...
Soy retales sueltos de lo que fui... no...
¿Recuerdas cuando llegaste aquí,
Iluminando todo el jardín?

En silencio... aún te hecho de menos... en silencio...

Mañana os pongo otra, y, ¡que vivan los turnos partidos!, ¡y más si son en fin de semana!

viernes, 17 de agosto de 2007

Otra jornada

Aquí sigo en mi montaña umbría, pero ya noto algo de calor en esta oscuridad permanente, mis ojos se han acostumbrado a la oscuridad, he aprendido a ver de nuevo, en estas nuevas condiciones, he aprendido a oír de nuevo, y, ¡ya escucho música en esta montaña maldita!, en fin, he agudizado mis sentidos, veo a los pajarillos gorjeando en la mañana, las pendientes parecen menos escarpadas, se podría decir que he aprendido a moverme en esta oscuridad eterna, y, ¡no es tan malo como creía!; dentro de poco me tendré que buscar un monte más escarpado, una oscuridad más espesa, si bien, los demás habitantes de este risco me han aconsejado que no lo haga, que he tenido suerte de llegar allí en verano, pero el invierno es bastante duro... ¡es que no saben lo que me gusta el frío!

Ya he coronado la cima varias veces, y he sentido su viento helado y los fantasmas que allí habitan ya me saludan amablemente, son unos grandes tipos, y varias veces he vuelto a bajar, pero algo me impulsa siempre hacia arriba, hacia la soledad de estar con mis propios fantasmas, conocerlos para conocerme mejor a mi, y es que tengo mucho que aprender, y mucho que recordar, es hora de que vuelva a aprender todo lo que he olvidado, es hora de que vuelva a ser todo lo que había sido; es hora de que un nuevo yo salga a la luz, y para eso no hay mejor ayuda que los fantasmas propios, la oscuridad, y el frío; tan sólo eso puede dar algo cristalino, ya que es la esencia que se busca sin cesar en esta montaña, tanta oscuridad, llama a la luz como un perro en celo, y la luz se deja querer; a veces baja a visitarnos, pero; esta luz que nos baña está hecha para los ojos que ven algo más, si no es así, no verás más que una negrura espesa, tanto que te inundaría las entrañas.

En fin, hasta una montaña umbría y elevada puede ser un gran lugar para formar la residencia, puede ser hasta cierto punto cálida, además, se agradecen mucho más las visitas que logran llegar hasta aquí, porque, si es que llegan a encontrarte, o es por que la señorita Azar les ha iluminado, o bien porque sus ojos también ven más allá de la espesa negrura, algo que es muy digno de tener en cuenta, y muy de agradecer.

Ahora os dejo, voy a iniciar la escalada, otra vez, voy a subir a ver a mis fantasmas, que en estos días los he tenido un poco abandonados, espero que sea una bonita velada; espero aprender más cosas sobre mí que desconocía hasta ese momento, pero no os apenéis, a la noche bajaré, no soy tan mal invitado como para incomodar a los anfitriones, además, aún mi cuerpo no se ha acostumbrado a la noche en los riscos más elevados, antes tendré que hacer más ejercicio de escalada...

jueves, 16 de agosto de 2007

Divagando

No sé quien dijo que dos mitades son una única cosa completa, pero, evidentemente, no se paró mucho a pensarlo, se dejó llevar por una lógica a la par aplastante e inocente.

No sé quien dijo que basta dos personas para mantener un diálogo, un diálogo es mucho más que el sumatorio de dos monólogos, pero esta persona tampoco se lo pensó demasiado, ¿estaría demasiado preocupado en lo que estaba diciendo, tanto que ni siquiera mirara si el resto le estaba escuchando?; no será otro más preso de la fábula del cazador cazado por su propio arma, y es que, armas como el escribir aún no se ha inventado otra, ¡tantas veces se disparan contra el que las empuña!.

Tampoco sé quien dijo que después de la noche viene el día, si bien es cierto que sin uno no existiría el otro, y, ¿qué hay de ese periodo intermedio?, sin duda, lo más hermoso de la jornada, el punto en el que el Sol ha desaparecido, y la Luna aún no ha comenzado a cabalgar, claro y oscuro a la vez. Aquí vemos también, como dos mitades no son un todo, hace falta algo más, simplemente con el día y la noche no tendríamos una jornada completa, faltaría algo...

¿Quién dijo que la música era pura inspiración?, ¿y quién dijo que eran matemáticas?; es tan cierto que los dos tienen razón, como que ninguno la tiene, y pregunto yo ¿y dónde está la armonía?, ¿y el tono?, ¿y el ritmo?, hay tantas cosas más que damos por supuestas...

¿Cuántos hemos dado por supuesto algo, que luego, se ha vuelto contra nosotros?, pequeños, no supongáis, comprobad, sacad vuestro martillo y hacerlo chocar contra vuestra suposición, si suena a hueco, tendréis localizado vuestro error, si suena macizo, ¡por lo menos podréis agarraros a él cuando sople el viento!.

Sed martillo, sed yunques, tan sólo así tendremos los dos puntos de vista, y ved que pasa con los objetos que probáis su resistencia; y, por supuesto, no sintáis tristeza por si algo que creíais valioso se desmorona al primer martillazo, estad felices por comprobar que algo que creíais débil, resiste estoicamente y os mira con unos ojos llenos de ternura.

No os engaño, el trabajo del forjador es duro, hay que resistir altas temperaturas y atmósferas sofocantes, pero merece la pena, ya que de cuando en cuando te das con algo que es más duro que tus propias herramientas, y hay que usar el ingenio si queremos ver la verdadera calidad de dicho ideal, y, por último, y sobre todas las cosas, por mucho que os llame la atención, y os parezca bello el exterior del ideal a probar, recordad que lo importante es lo que tenga dentro, y el aire no es demasiado valioso en estos casos...

No os desesperéis si notáis que la mayoría de los ideales prefabricados son huecos como un junco, por lo menos os valdrán para guardar cosas dentro y ocultarlas de miradas indiscretas.

martes, 14 de agosto de 2007

Para Septiembre

Saludos muchachada, hoy os quiero dar un consejo, es algo simple y meditado: fruto de largos años de experiencia: los que vayáis a presentaros a algo en los exámenes de Septiembre, al menos si son exámenes universitarios, no lo hagáis, os vais a pasar un verano puteados para sacar el mismo resultado que si no hacéis nada, os dedicáis a zurraros la sardina mística, o si os vais de cañas todos los días, pero encima sin haber echo nada de eso, total, no perdáis un verano de vuestra vida haciendo el tonto delante de un libro, para ir muy preparados a un examen en el que el profesor os va a hacer preguntas del plan: examen de química-física, cuestión 1: ¿Qué hizo el arcángel San Gabriel del día 2 de Abril, después de comerse el sandwich mixto?; total, por mucha partícula en la caja que hayáis estudiado, no os va a valer de nada... Y es que no hay cosa peor que un profesor universitario emputecido...

Total, dedicaros a lo que sabéis hacer bien, y el año que viene, el fary que es Dios y está en el cielo guíe vuestro camino por la senda por vosotros elegida, pero por ahora, hacer el vago un mesecito más y ya os ponéis, además, estudios científicos dictaminan que estudiar con tanto calor es malo, se te reblandece la estructura cerebral y en ciertos casos puede llegar a una encefalopatía espongiforme digna de cualquier vaca loca, y no es eso lo que queremos para el futuro de la sociedad, ¿verdad?, así que ya sabéis, mentalizaros bien, y pensar que todo lo que estáis estudiando no vale para nada, ya que en el magnífico examen de ese gran meses para los estudiantes: Septiembre, no va a valer de nada, porque vuestro querido profesor habrá escogido las preguntas como le haya salido de lo que viene siendo la wevada, así pues, no estudiéis, ¡¡y haced algo de provecho por el amor del Fary!!

domingo, 12 de agosto de 2007

Una de aventuras

Mierda, otra vez en este oscuro pasillo... Avancé cuidadosamente, era un pasillo angosto, iluminado por unas antorchas, se notaba la humedad en el ambiente y, de cuando en cuando, se oía el crujido de toda construcción antigua. Seguí avanzando, poco a poco, intentando agudizar mis sentidos... hasta que, de repente, llegué a una bifurcación. - Mierda... esto ya lo he visto antes en alguna parte...- lo que faltaba, un dèjá vu en un sitio así de acogedor. No me lo pensé mucho, opté por el de la izquierda, pensé. - Bueno, siempre hay un camino más fácil a la derecha, y ya que estoy aquí... pues a la izquierda. - En este pasillo se notaba más el olor a humedad y las paredes tenían un tacto más mohoso, me estaba adentrando en las profundidades de la madriguera, el aire tenía un olor cada vez más viciado, pero tenía que seguir avanzando, poco a poco, hasta que, en un punto del pasillo, al hacer un movimiento, sonó... ¡CLAK!, miré detrás de mi y vi como se me aproximaban 2 flechas, conseguí reaccionar, me tiré al suelo, si bien una me rozó la ropa. - ¡¡¿Qué coño hago yo con esta ropa?!!. - Pensé, uff, que mal me olía esta historia..
Bueno, no podía quedarme allí, avancé el resto del pasillo reptando, vi que algo me molestaba en la espalda... ¿un Bo?; esto ya me va gustando más.. el pasillo acabó, y llegué a una escalera de caracol, bueno, vamos hacia abajo...

Bajé las escaleras, no sin cautela, en el aire se respiraba azufre. O estoy en un volcán, o esto ahora sí que me huele mal... En la sala vi una puerta, me acerqué a ella e intenté escuchar a su través, pero me era imposible, era una puerta demasiado gruesa, así que, procedí a abrirla con cautela.
Cuando la abrí, un gran olor a azufre me hizo para para tomar aire, ahí el aire si que estaba viciado... cuando me repuse, por fin, la abrí del todo y metí la cabeza a ver que se cocía ahí dentro... - Joder, la guarida del dragón, a ver que hago yo ahora... espero que el Bo sea mágico, si no voy dao. - Ahí estaba, el dragón dormitando, pero algo inquieto, había captado mi presencia, haciendo gala de toda mi habilidad, me acerqué hasta él, con más miedo que siete viejas (ahora comprendí la magnitud de dicha expresión), y, cuando estaba cerca del monstruo, despertó súbitamente, y, a la misma velocidad que el formidable dragón rojo se elevaba, mi ánimo cayó por los suelos.
En un ataque banzai, saqué el Bo y fui corriendo hacia él, todo ocurrió muy rápido, tan sólo recuerdo la cabeza del dragón abalanzándose hacia mí, y mi Bo impactando en el cuello de la bestia, había tenido suerte... me quedé allí un rato contemplando a la magnífica criatura, pero, era hora de marchar, vislumbré otra puerta al final de la sala.
Esto ha sido sólo el principio, a ver que viene a continuación...- sólo de pensarlo tenía que contenerme para no salir corriendo, ahora, había de una pendiente considerable descendente, bueno, hay que bajar, y cuando puse los dos pies en la rampa... ¡CLAK!. - Mierda...- una roca gigante, salió de lo alto de la rampa, yo corrí y corrí, pero, en unos instantes la vi muy cerca, pegué un salto y me agarré como pude a la pared, y la roca siguió hacia abajo, sin mí, menos mal...

Al llegar abajo pude ver un objeto, brillante, en un pedestal, me acerqué, y comprendí el objeto de mi búsqueda, ¡¡¡¡¡había encontrado las llaves del coche!!!!!, buffffffffff... que tarde se me ha hecho, a ver como se lo explico al jefe esto....

sábado, 11 de agosto de 2007

Sigo entrenando

Ahí sigo en casa, entrenando yo solito, espero que nos juntemos los del club algún día en verano, pero está difícil la cosa; en fin, os voy a dejar una historia del maestro fundador; el Maestro Pham Xuan Tong:

"Antaño, el fuego y la claridad luchaban en el espacio inmenso. El fuego era negro en aquellos tiempos y la claridad estaba fría como el invierno. Cuando el fuego pasaba, había un abrasamiento de calor sombrío. Cuando la claridad aparecía, todo era hielo. No había verano posible, ni flores abiertas, ni pájaros gorjeando... Todo estaba triste, estéril, y la tierra no era más que un vasto caos sobre el cual planeaba el eterno combate entre dos adversarios irreductibles...
Mas he aquí que repentinamente, cansados de disputarse en vano el imperio del mundo, los dos enemigos se gritaron: ¡PAZ!... Y se lanzaron el uno contra el otro, no con odio, sino con el impulso del amor; el fuego y la claridad se abrazaron. En seguida, la blanca claridad se volvió ardiente, y el fuego negro apareció deslumbrante. La tierra fue una sonrisa, y en sus costados sintió estremecerse la primavera, pues, allá arriba, en medio del viejo campo de batalla, el campo azul de la paz y la reconciliación, había un gran SOL DE ORO"

Os lo pongo porque me ha parecido una bonita historia para explicar el principio de positivo y negativo, en que se basa cualquier filosofía del extremo oriente, ya me contaréis que os ha parecido.


PD: próximo libro a la vista "la ley de las mutaciones", a ver si aprendo algo con él ;)

jueves, 9 de agosto de 2007

Otra vuelta

Una vez dijo un gran filósofo, que el amar de un modo cercano, tirante, agarrando a la persona que amas es bonito, pero el auténtico amor se refleja cuando se abren las manos y se suelta libremente al ser amado; y es que, en ese momento, es cuando hay que descender de la más alta cima, de los riscos más elevados, yermos, en los que sólo hay hielos perpetuos y fantasmas, hasta la profundidad más recóndita del espíritu para entender de verdad ese amor, y es que, es mucho más fácil combatir contra las bestias y los fantasmas presentes en la subida a la gran cima, que enfrentarse con las propias profundidades de uno mismo, esas bestias si que dan miedo... esa conciencia si que tiene una buena dentadura, no como en la cima, que está helada de frío, y, ¡qué buenas dentelladas pega!, y, ¡cómo se sienten de dentro esas dentelladas!..; y es que, adentrarse en uno mismo tiene muchos inconvenientes, ni el más valiente, ni el más preparado, tienen el valor y la preparación suficiente como para enfrentarse a lo que realmente saben, y a lo que realmente son, y es ahí donde radica la dificultad de esta empresa, y, cuanto más bajas, más oscuro está, y bestias más horribles te vienen a visitar, ¡eso si que es una lucha sin descanso!, y no en la cima de la gran cumbre, ¡con los fantasmas por lo menos se puede razonar!.
Y, ¡ay, donde están mi águila y mi serpiente, mi voluntad y mi inteligencia, que tan fielmente me acompañaron hasta la gran cima!. Mi águila me dijo que no podía volar por debajo mía, tan sólo podía hacerlo por encima, ahí radica su grandeza, y su debilidad, mi serpiente, ser inteligente donde los haya, se quedó guardando la madriguera, y aquí estoy sólo, con la única meta de conocer y saber mejor que ocurrió para bajar tan rápidamente de esta altura magnífica, espero que las bestias me den pistas al menos, sería todo mucho más rápido...

Este filósofo también dijo que era de virtuosos regalar, con las manos abiertas, llenas de presentes, a todo el mundo que los quisiera, incluso a los indeseables, que iban robando las minucias que caían al suelo, ya que el ser regalados así les traía una mayor satisfacción, pero la verdadera virtud consistía en regalar con pudor, y en saber cuando cerrar las manos, y desaparecer, entre la bruma, para aparecer al cabo de un tiempo otra vez con las manos colmadas de presentes, esperando que los regalados hayan aprendido algo por si mismos; así pues, me pregunto si las bestias de mis profundidades querrán los presentes que les traigo, sin rencor ni maldad, si habré tenido el pudor suficiente, como para regalar algo que llene el espíritu de alguna, y luego desaparecer, para ser regalado, para entenderme un poco mejor...

No es tarea fácil en la que me veo enfrascado, nadie dijo que lo fuera, pero tengo que averiguar de donde ha sacado mi conciencia esos dientes tan fuertes, y, por lo menos, hacerme con otros iguales para poder plantearla algo de resistencia. Así que fácil, no es, ni mucho menos, ni tampoco es difícil, tan sólo es necesario...

miércoles, 8 de agosto de 2007

Todo está en el aire

Me encanta escribir por la mañana, al poco tiempo de despertarme, mi mente está fresca y tiene las mínimas influencias externas, los pensamientos aún fluyen en mi cabeza y luchan por salir, tan sólo me tengo que poner en frente del teclado y esperar, cuando la lucha cesa sólo queda uno en pie, y ahí está, los dedos se van moviendo solos y en 10 minutos, todo ha acabado, ya se está convirtiendo en un ritual para mí, y lo peor es que disfruto y me desahogo.

Hoy voy a contaros mis niños una parábola, en la que está todo en el aire, como su propio nombre indica, allá vamos, sin más dilación:

Había una vez un hombre caminando por el campo, y este hombre, no era una persona corriente, normalmente era calmado y racional, pero esta vez, este hombre estaba sediento de resultados, y fue a caminar al campo buscando una fuente que le calmara, buscó y buscó durante horas, pero los ríos que encontró no le satisficieron lo más mínimo, y, cada minuto que pasaba se sentía más ávido de resultados, ya no podía más, tenía que encontrar dicha fuente magnífica, la única que podría calmar su sed.
Siguió caminando y caminando, y en un claro, fruto de su desesperación llevó su mirada al cielo, y vio, como una revelación, algo que caía, poco a poco, desde una altura considerable, meciéndose por el viento, a veces subía, a veces bajaba, de forma imprevisible.
El hombre se quedó mirando con cara de bobo, intentando pronosticar que pasaría, debido a su avidez de resultados, ¿qué haría?, ¿caería, se mantendría?, comenzó a seguirlo, por el bosque, iba detrás con paso firme, corriendo la mayor parte del tiempo, pero lo que quisiera que fuere lo que tendría que caer, o no caer, parecía que no quería más que aumentar su crispación, seguía cayendo lentamente, luego se volvía a elevar merced a un golpe de viento...
Nuestro hombre estaba cada vez más desesperado, hasta que, de repente, se le iluminó la cara... le había llegado lo que él creía que sería un pensamiento sublime, ¿y que contendrá?, ¿qué será lo que cae?, ¿será una dulce flor, o será una amarga espina?. Su desesperación no hacía más que crecer, y crecer...
Siguió a lo que debería haber caído, según él, durante todo el día, pero eso no se daba por vencido, eso sí, con el paso del tiempo bajaba cada vez un poco más, si bien su velocidad aumentaba, y nuestro hombre estaba exhausto, pero se dijo, no puedo parar ahora, está a punto de suceder.
Al final, en la noche, eso se movía de una manera endiablada, y, nuestro hombre, que ya no podía ni tenerse en pie, acabo por perderle entre la espesura del bosque, nuestro hombre cayó rendido y desquiciado en el suelo, y comenzó a golpear el suelo, después de un tiempo, volvió a mirar al cielo, para pedirle explicaciones a su Dios, y, ¡oh, sorpresa!, vio como 400 esos se agolpaban en el cielo estrellado. Nuestro hombre quedó estupefacto, él, que casi había perdido la poca cordura que le quedaba, por perseguir a uno de esos, y ¡ahora resulta que había a montones!.
La desesperación se apoderó de él, se tumbó en el suelo, y al poco tiempo, debido al cansancio, la desesperación y el ayuno al que se había sometido, nuestro hombre murió en el suelo del bosque.
Las bestias fueron apareciendo, a ver que había ocurrido, todas le miraban complaciente, hasta que llegó el león y dijo. - Otro más que ansía su futuro con demasiada firmeza, y se olvidó tanto de su presente que pereció, ahora es un hombre del futuro.- Y la serpiente prosiguió. - Era un hombre ávido de resultados, por lo menos tenía la suficiente fuerza de voluntad como para perseguir su futuro, aún sabiendo que es imposible seguirlo, y que si te pones en su mano, no eres más que un juguete para él.

Moraleja: Hay para muchas cosas que aunque nos joda, la única forma de que se resuelvan es esperando, la mayoría de las cosas que queremos hacer en nuestro futuro, o en nuestro presente, aún dependiendo directamente de nuestra decisión, debemos esperar la decisión de mucha más gente, así que, si te marcas una meta, no te olvides de mirar a los lados y disfrutar del paisaje

martes, 7 de agosto de 2007

¡Vaya día!

Me levanté con fuerzas, cosa rara, era una buena señal, no tenía los párpados pegados, y pensé. -vaya, un buen día...-. Y de repente, vi como una palma de una mano de unos dos metros cuadrados se dirigía hacia mí, yo corrí dando vueltas por la habitación, pero, al final, me alcanzó, y ¡¡PLAFFFF!!, toma bofetón de realidad. Estuve un tiempo parado sin saber que había ocurrido, hasta que caí en la cuenta....- Mierda, hoy tengo que ir a por papeles para el curro...- Una hilera de sudor frío recorrió mi cuerpo, las ideas se me apelotonaban tanto en el cerebro que ninguna podía salir a la luz, tan sólo pude pensar una cosa "me voy a duchar y así hago tiempo y me quito el disgusto", y allí me puse, luego agarré los bártulos, y fui a mi tarea, en el reloj se contaban las diez menos cuarto de la mañana, me monté en el coche, puse música, y, nada, fuerza y honor, a por ellos, te los vas a comer a todos...

Después de media hora de conducción, lidiando con esos seres sobrenaturales llamados "domingus sense vacacionum pere com demasiadum tempo librem", y, tras comprobar que ellos se rigen por otro tipo de señales etéreas dibujadas en su imaginación, pero no atienden a las señales de tráfico materiales, después de casi estamparme con dos, logré llegar al destino.
Me tocó aparcar un poco lejos, a unos 400 metros. No está mal, pensarán algunos, como se nota que no han subido la primera cuesta del monte Avantos, hice gala de mis mejores piernas (me puse las de competi y todo), y nada, 400 metros hacia arriba al 15% de desnivel, noté como se me puso el culo duro y todo.
Bien, ahora sí he llegado a mi destino, entro, la oficina semivacía (10 funcionarios, 4 personas para ser atendidas, y un vigilante de seguridad), el vigilante de seguridad, muy amable, me preguntó a que venía, me entregó un papelito con mi número, y me deseó buenos días, que fueron correspondidos, no sin cierto asombro (qué tío más majo), y después de 5 minutos, la hora de la verdad... enfrentarse al funcionario emputecido ¡¡CHAN CHAN!!. Total, le saludo y le pido los dos papeles que tenía que recoger, y me mira raro, teclea y me los da de mala gana, resulta que hay un error en el código postal, se lo digo, y poco menos que me dice que eso será de bla bla bla, y que una polla pa mi culo, total, paso de discutir, resulta que ahora soy de Villarejo de Salvanés... por lo menos me han dejado en la misma provincia, aunque a unos 100 km más al Sur (claro, que así hace tanto calor este año, pensé yo).
De vuelta al coche, y es que, cuesta abajo, todo cuesta un poco menos, y nada, ahora otra media hora al siguiente destino, comisaría de Pozuelo de Alarcón, a coger el DNI renovado, otra vez luchando contra los seres sobrenaturales, menos mal que esta vez los funcionarios eran normales (yo creo que se echaron unas risas al ver la digitalización que le habían echo a mi pobre gepeto, vamos, la mujer que me dio el DNI me dijo, anda mira, es como tu pero en feo..)

Vuelta a casa, por la tarde, a Madrid a Correos, a entregar un currículum, menos mal que esta vez iba bien acompañado y se me pasó el tiempo volando, luego charlamos un poco y para casa...

Cuando llegué a casa, el reloj rezaba las 9 y media aproximadamente, de la noche... y ahí es cuando te da por pensar, y mi madre me pregunta, ¿qué tal el día?, a lo que yo respondo. -Buff... estoy reventaíco, y eso ¡¡QUÉ NO HE HECHO NADA EN TODO EL DÍA!!

Madre mía, a ver como se presenta hoy...

lunes, 6 de agosto de 2007

Hoy, una de las míticas

Hoy voy a echaros una de las conversaciones míticas con el gran josemari (a partir de las 12 de la noche se convierte en Cheman, el superhéroe a la busca de chatis indefensas), quien se pasara por mi espacio del msn hace tiempo ya la conoce:

Antes de nada, un poco de historia, ya que esto es una conversación entre dos, evidentemente, para que conozcáis más a la otra persona, aquí hay varios fragmentos de otras conversaciones nuestras, para que os vayais haciendo a la idea:

- ¡¡Quiero que me compren un dinosaurio!!
- No te lo pueden comprar tío...
- A ver, dame una razón para que no me lo puedan comprar
- Porque tendrías que alimentarlo con plantas de hace millones de años
(silencio tenso...)
- ¿Los pinos tienen millones de años?
- Depende lo grandes que sean, yo tengo uno con 7 u 8 años y mide ya 2 metros
- Entons cuando me compren el dinosaurio voy a comerme tu pino lechal.

Otra perla: La vida, ¿es un tránsito entre estados de equilibrio o de no equilibrio?

Ahora la historia en sí:

Casi no llega al autobús, pero esta vez, venía con un brillo especial en los ojos, no era para menos, hace un puñado de segundos, había tenido otra revelación, le habían intentado, otra vez, captar por una secta, digo perdón, asociación de estudiantes, como se hacían llamar, según sus propias palabras, le había parado una chica para decirle un mensaje d suma importancia: no podemos ver a dios porque está en otra dimensión (evidentemente, la chica era de letras), la chica siguió hablando largo y tendido, ya sabéis, cosas del amor infinito y demás, hubo un momento, que la vio con una luz blanca y estrellitas alrededor, pero entre llegar a la dimensión en la que está dios, o coger el autobús, decidió el autobús, una vez dentro me contó lo sucedido, como no pudo ser de otra manera, nos propusimos a sacar nuestra propia teoría, y se dio paso a una conversación, digámoslo así, un tanto vanguardista; la conversación no la recuerdo por completo, 45 minutos de autobús dan para mucho, trataremos de interconectar los puntos de la teoría sin por ello tener que omitir detalles, aunque mucho hayan naufragado en el espacio vacío entre neuronas:

- Debo tener un imán en la cabeza porque atraigo a todos los locos
- A ver que ha sido esta vez...
- Pues nada, una chica que me dice que no vemos a dios porque estaba en otra dimensión, y no se qué del amor infinito
- Vamos a ver, ¿te dice una chica nosequé del amor infinito y no te la llevas a lo oscuro?, si es que así está mu mal la cosa, y no me digas que no tenías condones que el viernes los regalaban con el periódico..; aunque por cierto, para mi dios es Michael Jordan...
- oO, pues yo vi a Michael Jordan que se metía por un hoyo de un campo de golf y luego iba a otra dimensión (momento aiku...), a ver si iba a ser verdad...
- Arop, pues nada, nos tocará probar los hoyos de golf, pero claro, tendrá que ser un campo con clase divina, no creo que valga lo del polaris world ese de Murcia...
- Pues nada, campo de golf por el que pase, me voy a liar a tirar pelotas al hoyo, y si no se llena, me meto a ver si voy a la dimensión de dios, y si me las devuelve, es dios también
- O un topo no te jode...
- (aiku) ¡si los griegos tenían a cancerbero para guardar el infierno, porque no puede guardar el cielo un topo!
- ¿Pero dios deberá estar bueno no?
- Claro, buenísimo, como Mónica Belucci
- Ale, pues ya tenemos dios, bueno diosa, pero dios no puede ser masculino porque si no no sería tan enrevesado
- Pues eso si que es verdad, y la mala quien va a ser, ¿madonna?
- ¿y por qué madonna?
- Porque como está en todos los fregaos y ya está mayor en nada se pondrá vieja y fea
- Claro, y el malo será el padre del fary
- Ahí le has dao, ya tenemos a todo montao
- Claro, porque tan importante es dios como los secundarios
- Bueno, pero no tiene mucho mérito, porque como los hace a su gusto, hace al bueno, alto, guapo y al malo feo y con joroba...
-Pues yo quiero un pisito en la dimensión de dios, que seguro que es una buena zona
- Pero será muy caro
-bueno, además tengo el abono C, llega seguro.
- eso sí, pa ir y volver no gastas gasolina
- ¿pero como será la dimensión de dios?, porque claro, será alguna de las "n" dimensiones.
- Eso fijo, o como mucho la n+1, pero vamos, tu la próxima vez se lo preguntas, a mi si me das el número de coordinación y el tipo de estructura te saco hasta el punto de fusión de la dimensión divina.
- Bueno, entonces cuando la vea otro día se lo pregunto, eso sí, la secta esta se tiene que llamar como "hoyo" pero en griego, que queda muy culto, porque en latín será algo como "burejum" y no mola tanto
- Pues na, el próximo día más ¡taluego xiquillo!

PD: ¿alguien sabe como coño se dice "hoyo" en griego?

domingo, 5 de agosto de 2007

¿Qué le pasa a la gente?

No puedo más que mirar atónito los acontecimientos que se suceden a mi alrededor, sobre todo entre el estrato de población que llamamos, por defecto "madura":
Los que hasta ahora eran los venerables ancianos, ahora se convierten en máquinas de matar, dispuestos a sacudirse en pleno centro comercial por un puesto más en la cola del supermercado, gritando como energúmenos y amagándose como si hubieran vuelto a la adolescencia súbitamente (que luego en invierno vienen los achaques...)
Los que podríamos decir que ahora mismo son la generación llamada a hacer algo en este país, estos que están entre los 30 y los 35, con suficiente edad como para tener experiencia en su campo, y con la suficiente juventud como para seguir formándose, parando en el arcén de la carretera para gritar a otro, cuando ha sido este primero quien se la ha liado al segundo, y, otra vez amenazar con llegar a las manos, cuan adolescentes pandilleros.
Por otro lado tenemos al colectivo femenino de mediana edad, que deben ir por el medio de un pasillo por el que caben tres personas, de tal manera que nadie les pueda adelantar por ninguno de los lados, si bien su velocidad no es mayor que la de un pollito de batalla.

Podemos concluir pues, que los venerables ancianos se han convertido en viejos, la generación madura llamada a hacer algo en este país en chuloputas, y el colectivo femenino de mediana edad en marujas, mientras tanto, parece haberse dado la situación inversa, ya que mientras la generación madura se ha convertido por completo en la pura adolescencia más macarra, la adolescencia tan sólo piensa en irse a la piscina a ver si liga, o en irse a las fiestas del pueblo X a ver si liga; comportándose como si del estrato social "maduro" se tratase.

Y pienso yo, que sí, a veces, si me lo propongo, incluso pienso, ¿no tendrá nada que ver, que mientras la adolescencia o está de vacaciones o está trabajando para sacarse unas pelillas, el 60% de los "maduros" este año no se pueden ir de vacaciones, y están aburridos de lustrarse las huevada durante todo el día en el salón viendo el Gente y demás truños, discutiendo con su pareja, con sus padres, porque tienen demasiado tiempo libre que no saben en que gastar, y cada vez que salen de casa revientan?

Total, o hemos llegado a crear un país de gentuza que se cree que está por encima del resto y tan sólo tiene que ir pisoteándolos, simplemente por que pasan ellos,
o bien que las hipotecas unida a la falta de luces de dicha población "madura" deja muchísimo que desear, hagan sus apuestas, el mal está hecho... y no se olviden de salir de casa sin su hacha/guadaña/espada, por lo que pueda pasar...


¡¡¡¡¡AGOSTO YA ESTÁ AQUÍ!!!!!

sábado, 4 de agosto de 2007

Dame más

¡Esto es como una droga!.- Exclamé en mi cabeza; aunque luego pensando, me di cuenta de que ojalá fuera como una droga, esto era mucho peor, tan rápido me bajaba a las más inhóspitas profundidades, con mis bestias internas, como me llevaba de nuevo al nivel del mar, con los pececillos asustadizos; tan pronto me elevaba a los más altos y yermos riscos, en compañía de las águilas, como de repente me encontraba de nuevo en el valle, con las ovejas. Mi voluntad subía y bajaba, ya no tenía el control de mi mismo, de pronto tenía todos mis sentidos hiperagudizados, de pronto mis ojos se nublaban en lágrimas, mi boca no podía articular palabra, en mis oídos tan sólo se oía la armonía de su voz, pero podía escuchar nada, mis articulaciones no reconocían mis movimientos.
Tuve que salir a caminar, caminé largo trecho enfrascado en mis pensamientos, sentía como mi ritmo cardíaco se aceleraba y disminuía sin ningún tipo de armonía, todas las canciones que escuchaba, todos los pensamientos que tenía eran sobre una sola cosa, así pues, regresé el camino andado, y seguí todo el día como un bobo, intentando oler en el aire su presencia, y recordando.

Visto lo que me iba a deparar el día, tomé el libro del Tao de la estantería y comencé a leerlo, creía que me iba a aportar serenidad, pero nada más lejos, los síntomas no hacían más que agravarse... ya estaba perdido...

Entonces me acordé de algo que llevaba escuchando por ahí un tiempo atrás tu tranquilo, lo peor viene de noche... estas palabras resonaron en mi como un peso muerto contra el suelo, sólo de pensarlo me causaba estragos, toda la noche, la cama, yo, y mi maltrecha cabeza dando vueltas al asunto...

Sí, llegó la noche, sí, mi maltrecho cerebro se empeñó en darle vueltas al día, y a lo que hubiera querido que fuera el día, sí, dí en torno a cinco mil vueltas en la cama, y al final, nada, caí rendido. Aún así dormí poco, me levanté empapado de sudor, otro día nuevo empezaba, y yo seguí con los mismos síntomas

No hay duda, vaquero, el amor fluye y corre por tus venas, y hace que te muevas a su voluntad, lo mejor es dejarse llevar y no pensar, pero es que es tan difícil...

viernes, 3 de agosto de 2007

Mi invierno comienza en verano

La ciudad se alejó de mí como un rayo, me recordó a las películas, o a los videoclips, ese efecto al que tantos recurren de alejar los objetos a cámara rápida mientras en primer plano una cara queda estupefacta, como sale también en El Señor de los Anillos cuando Frodo se pone el mismo, mientras, delante de mí, avanzaba con paso firme hacia la más absoluta oscuridad, tan sólo se veía una cima oscura, cubierta de bruma...
Hay que cargarse de valor, me dije, y allí me dirigí, con el espíritu helado mientras sentía el picor del intenso calor en el exterior, es una sensación extraña, como un intenso frío y un intenso calor no producen la templanza, por mucho que estén en contacto, deberían de revisar las leyes de la Física, en fin, pensé, tendré que aprender a sufrir en este viaje...

-¡¡Concéntrate!!, ¡¡espabila de una vez!!.- mi mente luchaba por hacer que todo funcionara, pero yo me sentía como si me hubiera extirpado un trocito de mí. No, no es lo que estáis pensando, no sentía como si me hubieran extirpado el corazón, entonces simplemente dejaría de latir y moriría, era mucho más que eso, una región nimia del cerebro, el tálamo, su labor es hacer que los sentidos funcionen, de esa parte estoy hablando. Como lobotomizado seguí hacia delante, con el paso firme del que no mira hacia delante, ni hacia atrás, y por supuesto, tampoco hacia los lados, con el paso firme del que no puede pensar, tan sólo tiene un objetivo, adentrarse en la negrura y fundirse con su bruma.

Y por fin llegué, después de un trecho interminable, llegué al Reino donde pocos recuerdan que hubiera salido el Sol alguna vez, y me refugié del extenuante Sol que rondaba camuflado, aún ahora sigo agotado, pero el objetivo está cumplido.

Y tan sólo estas palabras se cruzaron por mi cabeza, como sin querer.- Sin noche, nunca más volvería a amanecer.- Buff...- pensé - si el día es así, vaya noche me espera...